PERSONAJES: Hal 9000

El más refinado y novedoso computador de vuelo espacial diseñado por la NASA, en el pasado siglo XX, se convirtió, de la genial mano de Stanley Kubrick, en una desoladora parábola sobre los pelibros de la tecnología. Sin embargo, no es HAL 9000, de 2001: Una Odisea del espacio (2001: A Space Odyssey, 1968), un ente artificial gélido y avieso: el mayor conflicto humano de esta odisea es el de una máquina, de curioso ojo rojo omnipresente, obligada a mentir (y matar) para ocultar su secreto, el sentido de su vida. Kubrick diseñó el ordenador como una presencia en escarlata, un voyerista inquisitivo en el jardían cósmico del edén. Le dio las más largas e intensas líneas de diálogo (el patetismo de su angustiosa desconexión rematada con una canción infantil) de la película, concentrando en él todos los sentimientos (responsabilidad, pánico, autoconsciencia) que atormentan a los astronautas. Keir Dullea, que interpretaba a Bowman, lo definió así: "Hal era Kubrick".

HÁBLAME EN LA NOCHE
En un principio, la voz de HAL iba a ser la del actor Martin Balsam -el detective asesinado en la escalera de Psicosis (Psycho, Alfred Hitchcock, 1960)-, pero no superó la prueba definitiva del director, que quería escuchar sus líneas de diálogo en plena noche, en la oscuridad de la habitación del hotel, y conmoverse. Douglas Rain, casi desconocido, logró emocionar a Kubrick.